Empresas_FamiliaresEl tema que hoy me ha picado la curiosidad es el de las empresas familiares. Recuerdo haber dedicado una asignatura entera a esta temática en el máster que realicé hace 2 años. Y es que este tipo de empresas tienen lo suyo.

¿Qué tiene que ver esto con el turismo? Justamente en Mallorca, la isla dónde resido, existen muchas empresas pequeñas y no tan pequeñas pertenecientes al sector turístico que, coincidentemente, son familiares. Hablo de empresas como Barceló, Sol Melià, Globalia, Hoteles RIU, Iberostar, entre otras. De hecho, todas ellas pertenecen a la Associación Balear de la Empresa Familiar (ABEF).

Existen diversos artículos periodísticos, seminarios, cátedras, ponencias, reuniones e incluso congresos dedicados a esta temática. Se puede decir que la empresa familiar es un tema de plena actualidad. Muchos abogados tienen ya su departamento especializado en el tema y se ofrecen como expertos asesores para resolver los posibles conflictos que la empresa familiar genera o puede generar.

Y es que las estadísticas empiezan a ser preocupantes ya que el 70% de los negocios familiares desaparecen después de la muerte del fundador y sólo entre el 9 y el 15% consiguen llegar a la tercera generación.

Uno de los momentos más delicados para este tipo de empresas es la sucesión: el momento en que el fundador cede sus poderes, bienes, derechos y obligaciones a sus herederos.

Como ya he dicho anteriormente, existen muchas publicaciones y estudios que tratan este proceso pero, aún así, se extraña el testimonio de los verdaderos protagonistas, la voz de quienes deben tomar una difícil decisión para determinar el futuro de su empresa que nació de una idea, de una iniciativa personal, que más tarde se desarrolló a base de empeño, riesgo y esfuerzo. Imagino que no es fácil tomar esa decisión.

En el momento de la sucesión, el fundador es la pieza clave. Tomar la decisión de retirarse a tiempo y en plena lucidez es difícil, duro y cruel. Pero conviene hacerlo si uno quiere que el negocio siga adelante.

El fundador se escuda en frases como «aun estoy en forma, no debo perder el control, todavía soy imprescindible «. Cuesta entender y aceptar que nadie es imprescindible en esta vida. Cuesta asumir que un ciclo termina.

A pesar de las dificultades que presentan este tipo de empresas, existen algunas ventajas:

  1. Motivación. El hecho de que los compañeros de trabajo sean los mismos familiares invita a pensar que los trabajadores estarán más motivados ya que éstos persiguen los mismos intereses que la empresa. Si los miembros de la familia tienen derechos sobre las propiedades de la familia estarán dispuestos a trabajar para que la empresa funcione bien.
  2. Buenos hábitos. La familia crea y transmite hábitos de trabajo adecuados en las distintas generaciones.
  3. Altruismo. Se piensa en los demás (presentes y futuros) miembros de la familia.
  4. Lealtad. Se tiende a pensar en los pasados miembros de la familia y se quiere mantener la reputación adquirida por la empresa. Los familiares internalizan valores sociales como el cumplimiento de las obligaciones familiares.

Ya sabemos que no existen las cosas perfectas. Este tipo de empresas también pueden conllevar problemas:

  1. Traspaso de conflictos entre la empresa y la familia (hermanos que se llevan mal, más de un hermano, etc.).
  2. ¿Tiene la familia los conocimientos adecuados? Según Donald Getz, Jack Carlsen y Alison Morrison:
    ”Lack of professionalism is a frequent complaint levelled at family businesses. In tourism and hospitality, low entry barriers might attract investors with little or no relevant training or education. This can severely limit their potential to grow or prosper.”
  3.  ¿Basta con los miembros de la familia para gestionar la empresa? De nuevo según Donald Getz, Jack Carlsen y Alison Morrison:
    “if family firms grow substantially, should they hire professional managers or establish a board of directors encompassing non-family members?”

Una vez explicados algunos de los pros y contras de formar parte de una empresa familiar, os dejo la pelota en vuestro tejado para que me ayudéis a contestar las siguientes preguntas:

  • ¿Si vuestro padre fuera el fundador de una empresa y vosotros no fuérais elegidos como herederos, lo soportaríais?
  • ¿Existe una fórmula ideal para conciliar la familia, la propiedad de la empresa y la gestión de la misma?
  • ¿La entrada de trabajadores ajenos a la familia en la empresa puede dificultar el funcionamiento de la misma?
  • ¿Es preferible hacer heredero a un hijo no competente antes de hacer heredero a alguien competente pero ajeno a la familia?

Imagen: Fundapymes

Más sobre Caterina Jaume

Turismóloga y bloguera. De Mallorca. Dedicada a un turismo n-dimensional.